{"id":283,"date":"2021-06-25T11:14:40","date_gmt":"2021-06-25T14:14:40","guid":{"rendered":"https:\/\/www.parroquiasanfelipeneri.org\/?page_id=283"},"modified":"2021-06-25T15:41:59","modified_gmt":"2021-06-25T18:41:59","slug":"amasdecasa","status":"publish","type":"page","link":"https:\/\/www.parroquiasanfelipeneri.org\/amasdecasa\/","title":{"rendered":"Amas de Casa"},"content":{"rendered":"\n\t<div id=\"gap-1890600357\" class=\"gap-element clearfix\" style=\"display:block; height:auto;\">\n\t\t\n<style>\n#gap-1890600357 {\n  padding-top: 30px;\n}\n<\/style>\n\t<\/div>\n\t\n\n<div class=\"row\"  id=\"row-736838157\">\n\n\n\t<div id=\"col-295020818\" class=\"col medium-8 small-12 large-8\"  >\n\t\t\t\t<div class=\"col-inner\"  >\n\t\t\t\n\t\t\t\n\n<div class=\"row\"  id=\"row-658730021\">\n\n\n\t<div id=\"col-2140245687\" class=\"col small-12 large-12\"  >\n\t\t\t\t<div class=\"col-inner\"  >\n\t\t\t\n\t\t\t\n\n<h1><span style=\"color: #d83131;\"><strong>Amas de Casa<\/strong><\/span><\/h1>\n<h5><img loading=\"lazy\" decoding=\"async\" class=\"size-medium wp-image-290 alignright\" src=\"https:\/\/www.parroquiasanfelipeneri.org\/wp-content\/uploads\/2021\/06\/virgenmaria-229x300.jpg\" alt=\"\" width=\"229\" height=\"300\" srcset=\"https:\/\/www.parroquiasanfelipeneri.org\/wp-content\/uploads\/2021\/06\/virgenmaria-229x300.jpg 229w, https:\/\/www.parroquiasanfelipeneri.org\/wp-content\/uploads\/2021\/06\/virgenmaria.jpg 255w\" sizes=\"(max-width: 229px) 100vw, 229px\" \/><\/h5>\n<p><span style=\"font-size: 90%;\"><em>\u201c \u2026Preoc\u00fapense incansablemente de difundir en todo lo que puedan la devoci\u00f3n a Mar\u00eda confiando en su misericordia y eficacia de su protecci\u00f3n . Sobre todo hagan que se re\u00fanan alrededor de la Virgen j\u00f3venes y ni\u00f1os, en cuyas almas m\u00e1s f\u00e1cilmente se siembra, m\u00e1s honda echa sus ra\u00edces, con m\u00e1s fuerza crece y con m\u00e1s abundancia da sus frutos la devoci\u00f3n a Mar\u00eda..\u201d<\/em><\/span><\/p>\n<h5>Venerable Jos\u00e9 Frassinetti<\/h5>\n\t<div id=\"gap-2082560868\" class=\"gap-element clearfix\" style=\"display:block; height:auto;\">\n\t\t\n<style>\n#gap-2082560868 {\n  padding-top: 97px;\n}\n<\/style>\n\t<\/div>\n\t\n\n<p>\u201cNadie pudo explicar esto\u201d. Esta frase conforma el t\u00edtulo de uno de los cap\u00edtulos de un muy difundido libro cuyo autor, un conocido periodista, le dedicara a la Virgen y a los milagros que por su intercesi\u00f3n se han producido.<\/p>\n<p>Ninguna persona puede elucidar racionalmente (y quiera Dios librarnos de ello) el motivo por el cual, si uni\u00e9ramos sobre un planisferio con una l\u00ednea imaginaria, las ciudades en las que se hallan o en las que en el futuro habr\u00e1, r\u00e9plicas de la imagen de la Virgen de las amas de casa: San Felipe Neri en Buenos Aires, ya entronizada, con Calcuta, que aun no cuenta con ella y Roma, que ya la tiene en la parroquia de Villanello, con la Ciudad del Cabo, a la que en breve lapso se la llevar\u00e1; quedar\u00eda trazada sobre el mapa una cruz casi perfecta. En el momento de escribir esta historia, a poco de exaltarse otra imagen de Nuestra Se\u00f1ora en Villa General Belgrano, en la provincia de C\u00f3rdoba, est\u00e1 a punto de iniciarse en la Bas\u00edlica de San Pedro la exposici\u00f3n exequial de los restos mortales de S.S. el Papa Juan Pablo II, ligado a este relato por la magn\u00edfica, sorprendente y tan directa intervenci\u00f3n que le cupo en la difusi\u00f3n de esta advocaci\u00f3n.<\/p>\n<p>Corr\u00eda el 2000, a\u00f1o jubilar con el que finaliz\u00f3 el siglo XX y se llevaba a cabo en la ciudad norteamericana de Miami un congreso de j\u00f3venes cat\u00f3licas al que concurri\u00f3, especialmente invitada, la presidenta de la Liga Internacional de Amas de Casa, acompa\u00f1ada por otras integrantes de ese nucleamiento, tanto de la agrupaci\u00f3n mundial como de la filial argentina.<\/p>\n<p>En un intervalo producido entre las reuniones programadas, la se\u00f1ora \u00c1ngela P. (Lita) de Lazzari advirti\u00f3 que sobre una mesa se exhib\u00edan estampas con diversas im\u00e1genes religiosas en general y muchas con la de la Virgen Mar\u00eda en particular. Fue muy grande su sorpresa cuando not\u00f3 en una de las representaciones, un grabado que le result\u00f3 singularmente atractivo, se trataba de una figura hasta entonces desconocida para ella, de la Sant\u00edsima Virgen, de espaldas y realizando la tan dom\u00e9stica tarea de tender en una cuerda ropa reci\u00e9n lavada, mientras cerca, un peque\u00f1\u00edsimo Jes\u00fas la observaba desde el suelo. Fue a partir de ese momento que no cej\u00f3 hasta conseguir que alg\u00fan artista plasmara en una estatua, la representaci\u00f3n de la imagen hasta entonces inexistente de Santa Mar\u00eda, Patrona de las amas de casa.<\/p>\n<p>Ya de regreso, en Buenos Aires, recurri\u00f3 munida de la estampita hallada en Miami, al doctor Fernando R. Pugliese, abogado dedicado a un magn\u00edfico emprendimiento art\u00edstico y famoso creador del parque tem\u00e1tico \u201cTierra Santa\u201d para que modelara una figura de la Sant\u00edsima Virgen en el mismo material con el que fueron confeccionadas las m\u00faltiples formas que pueblan su acreditada producci\u00f3n.<\/p>\n<p>La obra, fruto de la inspiraci\u00f3n de este notable creador result\u00f3 una imagen sencilla y totalmente desprovista de ornamentos. Se trata de un ama de casa que no podr\u00eda realizar sus tareas coronada, ni mucho menos ataviada con lujosos vestidos o rodeada de pomposos atributos. Ella sostiene con firmeza al hijo apret\u00e1ndolo contra su pecho; sin duda un s\u00edmbolo de amor y de protecci\u00f3n conmovedor. La Virgen tiene en su mano un trozo de pan tomado de una hogaza que entre otras lleva en un atado que cuelga de su brazo izquierdo del cual hab\u00eda tomado otro para el ni\u00f1o, el que en poder de este se convierte en hostia consagrada. A sus plantas un canasto con ropa, en apariencia reci\u00e9n acicalada y una jarra con leche, alimento b\u00e1sico para su hijo, completan el conjunto.<\/p>\n<p>Terminada la obra faltaban cumplir pasos bastante dif\u00edciles por cierto para concretar el sue\u00f1o compartido de Lita y del doctor Pugliese. Quer\u00edan que la imagen fuera bendecida por S.S. el Papa Juan Pablo II y para eso era preciso trasladarla a Roma, poder ingresarla al territorio italiano, acceder a la Plaza de San Pedro y conseguir que el Santo Padre, obviamente acerc\u00e1ndose a \u00e9l lo m\u00e1s posible, pudiera consagrarla.<\/p>\n<p>Consultados monse\u00f1or Bergoglio, Arzobispo de Buenos Aires, su vocero, el padre Marc\u00f3 y otros dignatarios y religiosos, todos opinaron que conseguir lo que se propon\u00edan era pr\u00e1cticamente imposible o por lo menos que les llevar\u00eda una tramitaci\u00f3n que en el mejor de los casos resultar\u00eda prolongad\u00edsima. El no sacerdotal de Buenos Aires ya estaba dado y la idea qued\u00f3 casi abortada de entrada.<\/p>\n<p>Pero la intenci\u00f3n de hacerla bendecir por el Santo Padre era muy fuerte y la decisi\u00f3n ya estaba tomada. Sin recomendaciones, sin contactos y sin ninguna llavecita que abriera alguna puerta en Roma once personas; Carlos, Fernando, Augusta y Mar\u00eda Silvia Pugliese, la diputada Ferrero, M\u00f3nica y Fito Schuller, Lita de Lazzari, Teresita Mennuti, Gino Chiusi y Mario Giaccone; emprendieron el viaje en un vuelo de l\u00ednea llevando a la imagen, de dos metros de altura, embalada en una gran caja de madera.<\/p>\n<p>En R\u00edo de Janeiro deb\u00edan cambiar de avi\u00f3n y all\u00ed surgi\u00f3 el primer inconveniente. Por sus dimensiones el caj\u00f3n no cab\u00eda en la bodega del aparato que deb\u00edan abordar para continuar el viaje y las autoridades brasile\u00f1as pretend\u00edan retenerlo y almacenarlo en un dep\u00f3sito de la estaci\u00f3n a\u00e9rea. Ante la insistencia de los argentinos se pusieron firmes y convocaron a la polic\u00eda encargada del control del aeropuerto, el oficial a cargo orden\u00f3 abrir la caja y al descubrir la figura de la Virgen los brasile\u00f1os comenzaron a rezar, los pasajeros del vuelo retenido a bogar para que se permitiera cargar la imagen y al cabo el personal del aeropuerto puso manos a la obra para adecuar el tama\u00f1o del caj\u00f3n a las dimensiones de la bodega de la nave. Cuando por fin la patrona de las amas del casa fue subida al avi\u00f3n, se estaba a punto de suspender el vuelo por la demora ocasionada, los pasajeros, la tripulaci\u00f3n y el personal del aer\u00f3dromo prorrumpieron en un aplauso estruendoso y en vivas a la Virgen; sin duda la Santa Madre sonre\u00eda.<\/p>\n<p>No fue sencillo atravesar la aduana del aeropuerto de Fiumicino. \u201cI Carabinieri\u201d no le franqueaban el paso a la \u201cMadonna\u201d, era comprensible, una imagen tan grande, proveniente de un lejano pa\u00eds sudamericano bien podr\u00eda haber sido un buen veh\u00edculo para ingresar a Italia elementos, substancias u objetos de entrada vedada a ese pa\u00eds. No obstante, luego de un arduo cambio de argumentos argentinos y de oposici\u00f3n italiana un \u201cva via\u201d dej\u00f3 librado el ingreso de la imagen a la pen\u00ednsula. Pero, faltaba aun el paso m\u00e1s dif\u00edcil, llegar al Papa.<\/p>\n<p>Desde el hotel de la ciudad eterna en el que se hospedaban trasladaron a la Virgen en una camioneta hasta el Vaticano, posteriormente, los seis hombres la llevaron en andas hasta que un primer control de seguridad los detuvo y les indic\u00f3 que no pod\u00edan continuar. Luego de explicaciones, de pedidos y de s\u00faplicas, la primera valla cedi\u00f3 y la peregrinaci\u00f3n argentina pudo continuar.<\/p>\n<p>Un segundo control les impidi\u00f3 el paso, esta vez un hombre de casi dos metros cuyo cuello era semejante al pescuezo de un toro les cort\u00f3 en\u00e9rgicamente el paso pero la resoluci\u00f3n de nuestros compatriotas era inquebrantable, se sumaron otros guardias y el periplo parec\u00eda haber llegado a su fin. El argumento de la se\u00f1ora de Lazzari fue irrefutable \u201c&#8230; pero muchachos, somos argentinos, les dimos a Maradona, a Batistuta y a Crespo y ustedes no nos dejan pasar con esta imagen de Santa Mar\u00eda para hacerla bendecir por el Papa &#8230;\u201d. El razonamiento fue contundente y pudieron trasponer este control que no era el \u00faltimo, sin duda la Virgen esbozaba una sonrisa tan c\u00f3mplice como invisible.<\/p>\n<p>Restaba llegar hasta el lugar en el que en poco tiempo m\u00e1s se encontrar\u00eda Juan Pablo II, atravesar la muchedumbre que ocupaba la Plaza de San Pedro y otro cord\u00f3n de seguridad ahora conformado por la famosa Guardia Suiza. Con la figura religiosa en angarillas era francamente, una tarea herc\u00falea. Seis hombres la llevaban, las mujeres argentinas los segu\u00edan y al ver que a su paso todos le daban lugar desconocidos peregrinos se sumaban a ellos. La guardia del Papa ante una se\u00f1al del \u00faltimo de los custodios tambi\u00e9n dej\u00f3 pasar a los imparables argentinos, quienes se hab\u00edan convertido a esta altura en los due\u00f1os de la imponente plaza. A tal punto esto fue as\u00ed que el doctor Pugliese indic\u00f3 el lugar en el que deb\u00edan colocar la imagen, cambi\u00e1ndola varias veces de sitio hasta que encontr\u00f3 el m\u00e1s adecuado, nada menos que ante el p\u00f3rtico central de la bas\u00edlica, lugar de paso obligado para que el Sumo Pont\u00edfice llegara al altar armado frente a ella desde el que presidir\u00eda la ceremonia religiosa programada. Hoy, el afable y memorioso doctor Pugliese nos relata esta historia y con un dejo indudablemente c\u00f3mico agrega \u201c&#8230; puse a la imagen donde quise &#8230;\u201d. El impulso arrollador que los mov\u00eda hab\u00eda neutralizado a todo el servicio de seguridad montado en la hist\u00f3rica plaza.<\/p>\n<p>El Sumo Pont\u00edfice arrib\u00f3 en un \u201cJeep\u201d blanco en cuyos laterales pod\u00eda apreciarse su escudo her\u00e1ldico, vio a la imagen, la bendijo y sigui\u00f3 su camino hasta el altar. Parec\u00eda haberse cumplido el objetivo \u00faltimo del viaje, no era as\u00ed. La Sant\u00edsima Virgen segu\u00eda sonriendo y organizaba un desenlace sobrecogedor.<\/p>\n<p>Finalizada la celebraci\u00f3n lit\u00fargica el Santo Padre subi\u00f3 a un autom\u00f3vil descapotable y al pasar nuevamente frente a la impactante figura de la madre de Cristo hizo detener el veh\u00edculo y dio la posibilidad a que la se\u00f1ora de Lazzari y sus acompa\u00f1antes se acercaran a \u00e9l. La emoci\u00f3n de Lita fue tan grande que mientras tomaba las manos del Papa se presentaba y en italiano le explicaba los pormenores aqu\u00ed relatados. Hasta que la voz suave y serena pero de tono firme de un monse\u00f1or que lo asist\u00eda le dijo: \u201cse non toglie le sue mani il Santo Padre non potr\u00e1 benidirla\u201d (si no sueltas sus manos el Santo Padre no podr\u00e1 bendecirla) la se\u00f1ora de Lazzari liber\u00f3 las palmas de Su Santidad y su sue\u00f1o se cumpli\u00f3 con generos\u00edsima abundancia. Era el 6 de mayo de 2002.<\/p>\n<p>Al otro d\u00eda, el padre Jhon, tambi\u00e9n asistente del Pont\u00edfice, recibi\u00f3 a Lita y al doctor Fernando Pugliese en el Palacio Apost\u00f3lico y les transmiti\u00f3 que a Juan Pablo II le hab\u00eda gustado mucho la imagen, especialmente por su sencillez y por lo que representaba y les ped\u00eda que si era posible enviaran figuras similares a Italia, a la India y a Sud\u00e1frica. Parte de ese pedido ya se ha cumplido.<\/p>\n<p>De vuelta en la Argentina la Sant\u00edsima Virgen Mar\u00eda, patrona de las amas de casa bendecida por el Santo Padre, fue entronizada en la parroquia San Felipe Neri convirti\u00e9ndose en el primer templo del mundo en el que se rindi\u00f3 culto de hiperdul\u00eda a esta advocaci\u00f3n, lo sigui\u00f3, como ya fue expuesto, la parroquia de Villanello, cerca de Roma y los seguir\u00e1n en breve lapso, Calcuta y la Ciudad del Cabo.<\/p>\n<p>Nuestra madre celestial se encarg\u00f3 de trazar una imaginaria cruz sobre el planeta cargada por cierto de un gran simbolismo. En su rostro continuaba, seguramente, deline\u00e1ndose un dulce e inapreciable retozo.<\/p>\n<p>Falco, Orlando W, \u00abHistoria de la Parroquia San Felipe Neri,<br>75 a\u00f1os al servicio de Dios, de la Fe y de los hombres\u00bb,<br>Buenos Aires, El Escriba, 2005.<\/p>\n\n\t\t<\/div>\n\t\t\t\t\n<style>\n#col-2140245687 > .col-inner {\n  margin: 0px 0px -23px 0px;\n}\n<\/style>\n\t<\/div>\n\n\t\n\n<\/div>\n\n\t\t<\/div>\n\t\t\t\t\t<\/div>\n\n\t\n\n\t<div id=\"col-1647340186\" class=\"col medium-4 small-12 large-4\"  >\n\t\t\t\t<div class=\"col-inner\" style=\"background-color:rgba(240, 221, 206, 0.849);\" >\n\t\t\t\n\t\t\t\n\n<div class=\"row row-collapse row-full-width\"  id=\"row-1495696025\">\n\n\n\t<div id=\"col-239259232\" class=\"col small-12 large-12\"  >\n\t\t\t\t<div class=\"col-inner\"  >\n\t\t\t\n\t\t\t\n\n<h3><strong><span style=\"color: #d83131;\">San Felipe Neri<\/span><\/strong><\/h3>\n<p><strong>Nuestro Patrono<\/strong><\/p>\n<p><img loading=\"lazy\" decoding=\"async\" class=\"alignnone wp-image-115 size-full\" src=\"https:\/\/www.parroquiasanfelipeneri.org\/wp-content\/uploads\/2021\/06\/sanfelipeneri_ch2.jpg\" alt=\"\" width=\"203\" height=\"172\" \/><\/p>\n\n\t\t<\/div>\n\t\t\t\t\n<style>\n#col-239259232 > .col-inner {\n  margin: 0px 0px -19px 0px;\n}\n<\/style>\n\t<\/div>\n\n\t\n\n\t<div id=\"col-353026388\" class=\"col small-12 large-12\"  >\n\t\t\t\t<div class=\"col-inner\"  >\n\t\t\t\n\t\t\t\n\n\n\t\t<\/div>\n\t\t\t\t\t<\/div>\n\n\t\n\n\t<div id=\"col-54760609\" class=\"col small-12 large-12\"  >\n\t\t\t\t<div class=\"col-inner\"  >\n\t\t\t\n\t\t\t\n\n<p>Felipe naci\u00f3 en 1515. Su padre era notario abogado, con aficiones de alquimista: la primera ense\u00f1anza la recibi\u00f3 con los Dominicos. De Florencia su ciudad natal, fue a Roma, donde estudi\u00f3 filosof\u00eda. Gustaba de las humanidades y escrib\u00eda poes\u00edas.<\/p>\n<p><a href=\"https:\/\/www.parroquiasanfelipeneri.org\/nuestro-patrono-san-felipe-neri\/\">Leer m\u00e1s...<\/a><\/p>\n\n\t\t<\/div>\n\t\t\t\t\t<\/div>\n\n\t\n\n\t<div id=\"col-536689668\" class=\"col small-12 large-12\"  >\n\t\t\t\t<div class=\"col-inner\"  >\n\t\t\t\n\t\t\t\n\n\n\t\t<\/div>\n\t\t\t\t\t<\/div>\n\n\t\n\n<\/div>\n\n\t<div id=\"gap-1911075471\" class=\"gap-element clearfix\" style=\"display:block; height:auto;\">\n\t\t\n<style>\n#gap-1911075471 {\n  padding-top: 30px;\n}\n<\/style>\n\t<\/div>\n\t\n\n<div class=\"is-divider divider clearfix\" style=\"max-width:100%;\"><\/div>\n\n\t<div id=\"gap-1439133985\" class=\"gap-element clearfix\" style=\"display:block; height:auto;\">\n\t\t\n<style>\n#gap-1439133985 {\n  padding-top: 24px;\n}\n<\/style>\n\t<\/div>\n\t\n\n<div class=\"row row-collapse row-full-width\"  id=\"row-588243045\">\n\n\n\t<div id=\"col-874025103\" class=\"col small-12 large-12\"  >\n\t\t\t\t<div class=\"col-inner\"  >\n\t\t\t\n\t\t\t\n\n<h2><strong><span style=\"color: #d83131;\">INSCRIPCIONES<\/span><\/strong><\/h2>\n<p><strong>Bautismo:<\/strong><br \/><span style=\"font-size: 80%;\">Anotarse con un mes de anticipaci\u00f3n, y participar de dos encuentros de preparaci\u00f3n catequ\u00edstica los d\u00edas viernes y s\u00e1bados a las 19.30.<\/span><\/p>\n<p><strong>Primera comuni\u00f3n:<\/strong><br \/><span style=\"font-size: 80%;\">Nos reunimos todos los s\u00e1bados de 14 a 16 hs. Tener 9 a\u00f1os o estar cursando 4\u00ba grado.<\/span><\/p>\n<p><strong>Confirmaci\u00f3n:<\/strong><br \/><span style=\"font-size: 80%;\">Inscripciones a partir de la primera semana de abril para j\u00f3venes a partir de 15 a\u00f1os. Todos los s\u00e1bados de 11 a 12.30.<\/span><\/p>\n<p><strong>Unci\u00f3n de enfermos:<\/strong><br \/><span style=\"font-size: 80%;\">Al comienzo de Adviento y Cuaresma.<\/span><\/p>\n<p><strong>Matrimonio:<\/strong><br \/><span style=\"font-size: 80%;\">Anotarse con 2 meses de anticipaci\u00f3n.<\/span><\/p>\n<p><strong>Catequesis Adultos:<\/strong><br \/><span style=\"font-size: 80%;\">Preparaci\u00f3n para aquellos que no hayan recibido los sacramentos del Bautismo, Comuni\u00f3n y Confirmaci\u00f3n.<\/span><\/p>\n\t<div id=\"gap-1678028272\" class=\"gap-element clearfix\" style=\"display:block; height:auto;\">\n\t\t\n<style>\n#gap-1678028272 {\n  padding-top: 30px;\n}\n<\/style>\n\t<\/div>\n\t\n\n<p>Servicio Sacerdotal de Urgencia del Arzobispado de Buenos Aires:<br \/><span style=\"font-size: 120%;\"><strong>Tel: 4801-2000<\/strong><\/span><\/p>\n\t<div id=\"gap-1378731194\" class=\"gap-element clearfix\" style=\"display:block; height:auto;\">\n\t\t\n<style>\n#gap-1378731194 {\n  padding-top: 30px;\n}\n<\/style>\n\t<\/div>\n\t\n\n\n\t\t<\/div>\n\t\t\t\t\n<style>\n#col-874025103 > .col-inner {\n  margin: 0px 0px -19px 0px;\n}\n<\/style>\n\t<\/div>\n\n\t\n\n<\/div>\n\n\n\t\t<\/div>\n\t\t\t\t\n<style>\n#col-1647340186 > .col-inner {\n  padding: 20px 20px 20px 22px;\n}\n<\/style>\n\t<\/div>\n\n\t\n\n<\/div>\n\n\n\n<p><\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"","protected":false},"author":2,"featured_media":0,"parent":0,"menu_order":80,"comment_status":"closed","ping_status":"closed","template":"","meta":{"footnotes":""},"_links":{"self":[{"href":"https:\/\/www.parroquiasanfelipeneri.org\/wp-json\/wp\/v2\/pages\/283"}],"collection":[{"href":"https:\/\/www.parroquiasanfelipeneri.org\/wp-json\/wp\/v2\/pages"}],"about":[{"href":"https:\/\/www.parroquiasanfelipeneri.org\/wp-json\/wp\/v2\/types\/page"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/www.parroquiasanfelipeneri.org\/wp-json\/wp\/v2\/users\/2"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/www.parroquiasanfelipeneri.org\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=283"}],"version-history":[{"count":0,"href":"https:\/\/www.parroquiasanfelipeneri.org\/wp-json\/wp\/v2\/pages\/283\/revisions"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/www.parroquiasanfelipeneri.org\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=283"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}